Tanta basura espacial: ¡Barremos el espacio alrededor de nuestra Tierra!
Un peligro grande para la exploración espacial presente y futura es la basura orbitando la Tierra, cada día en aumento: miles de trozos de diferentes tamaños, desde pedazos diminutos de cohetes que explotaron, hasta satélites enteros en desuso de varias toneladas. Se estima que actualmente hay más de 600.000 objetos mayores de un centímetro de diámetro en órbita alrededor de la Tierra. Solo una parte ínfima de ellos, unos 13000 objetos, están siendo observados regularmente, por el sistema norteamericano Space Surveillance, calculando su órbita y así pudiendo evitar un posible choque con la Estación Espacial Internacional (ISS) o con un satélite activo.
Pese al pequeño tamaño de la mayor parte de los fragmentos, las vertiginosas velocidades a las que están sometidos hacen de éstos una seria amenaza a cualquier misión espacial que pueda ser efectuada en un futuro cercano. La basura espacial se ha convertido en una preocupación cada vez mayor en estos últimos años, puesto que las colisiones a velocidades orbitales pueden también producir aún más basura espacial, en forma de reacción en cadena, transfórmandose pronto en algo incontrolable, ya que las colisiones se irán multiplicando y, a la vez, aumentará el número de objetos peligrosos en órbita, disparatándose de forma exponencial. Se estima que, a partir del 2055, salir hacia el espacio será una misión prácticamente imposible si no se hace nada antes al respecto.
Los expertos reconocen que hacer frente a este problema es complicado y costoso, por lo que sería necesario que los investigadores idearan nuevos métodos para solucionar esta clase de problemas. Sin embargo hay una buena noticia al respecto; la agencia rusa ROSCOSMOS anuncia un proyecto ambicioso de limpieza espacial.
La idea es barrer el espacio en la cercanía de la Tierra, y eliminar objetos en desuso mandándolos a una orbita que termina en su incineración en la alta atmósfera terrestre. Esta misión se iniciará en 2020 y podría trabajar por unos 15 años. Los costos se estiman en 2000 millones de dólares. ¿Será la solución del problema? ¡Veremos!
(vía: SpaceDaily.com)