Astronomía en las banderas nacionales del Mundial de Fútbol 2010
Ahora todos estamos en la "Fiebre mundialera" durante plena Copa Mundial de Fútbol Sudáfrica 2010, e incluso los más aficionados a la astronomía dejarán al lado su hobby para emocionarse con la "Roja". Pero en muchas cosas "nada que ver" con astronomía, hay relaciones escondidas que vale la pena descubrir. Así también con este evento que actualmente domina la mente de miles de millones personas en todo el mundo.
Cada partido del mundial empieza con el canto de los himnos nacionales, y durante el himno se exponen las banderas nacionales de los rivales. Se fijaron que en muchas de éstas banderas lucen símbolos que se relacionan con la astronomía?
En realidad, esto vale para 17 de los 32 países clasificados para el mundial, más que la mitad. La mayoría de ellos usan estrellas, el sol, la luna o hasta constelaciones enteras del cielo nocturno para adornar su bandera nacional. En esta comunicación me limito a los 32 países participantes al mundial, que podrían servir como muestra para un estudio más general, cubriendo el simbolismo en las banderas de los más que 200 países en nuestro planeta.
Lo más habitual son una o varias estrellas, como en la bandera de EEUU, que actualmente contiene 50 estrellas, una para cada unos de sus estados. Las 13 franjas en blanco y rojo se refieren a las primeras colonias inglesas, que declararon su independencia en el año 1776; en esta oportunidad también se añadieron las estrellas, como símbolo de la libertad. Los tres colores blanco, azul y rojo son una herencia del "Union Jack" inglés.
La bandera de Chile está inspirada por la de EEUU, y comparte sus colores: La estrella blanca simboliza la libertad, su fondo azul los cielos despejados en el Norte del país, la franja blanca la nieve en la cordillera de los Andes y la franja roja la sangre derramada por los héroes libertadores. Hay otros 5 países más que usan estrellas en sus banderas: sea una estrella solitaria como símbolo de la libertad como Chile (Paraguay, Ghana y Camerún) o varias estrellas, para presentar el número de sus estados, provincias o territorios como EEUU (3 en el caso de Eslovenia, 5 en el caso de Honduras).
Un segundo grupo de países usa el sol como símbolo principal en su bandera. El sol de Argentina y Uruguay está personalizado, tiene una cara y rayos que lo rodean. En cambio, países del Este Lejano usan un sol abstracto, en forma de un círculo central que es uniforme rojo en el caso de Japón. El círculo de Corea del Sur contiene el "Yin y Yang" que simboliza la dualidad y armonía de la naturaleza; además, la misma bandera demuestra los cuatro elementos de la antigüedad (cielo, fuego, agua y tierra). Corea del Norte, en cambio, muestra un sol blanco, y en su centro la estrella roja, símbolo del comunismo.
La media luna, acompañada por una o varias estrellas, es un símbolo muy antiguo del Islam. Muchos de los países islámicos usan esto en sus banderas, así también el país eliminado del grupo C, Argelia.
Hay un grupo de 3 países, que reproducen constelaciones enteras: Australia y Nueva Zelanda eligieron la Cruz del Sur, en el caso de Australia con una estrella adicional, más grande y solitaria (abajo del "Union Jack" ingles), cuyos 7 rayos corresponden a los 7 estados federales de Australia.
Desde el punto de vista astronómico, el campeón mundial es Brasil: Su bandera contiene todo un planetario, con un total de 27 estrellas que simbolizan los 26 estados del país y el distrito federal. Pero esto no se refiere sólo al número total, como en el caso de EEUU: cada estrella es individualizada en su constelación, y asignada a un estado particular. Varias constelaciones son reconocibles como la Cruz del Sur, Escorpión y Canis Maior (para más detalle, pinche aquí). Hay que destacar además que la estrella solitaria y pequeña en la parte baja de la bandera se refiere a Sigma Octantis, un estrella apenas visible al ojo desnudo (magnitud 5,4), pero la más cercana al polo sur celeste, tal vez importante en la navegación explorando el mundo nuevo a finales del siglo XV. Sigma Octantis representa el distrito federal de la capital Brasilia. La bandera brasileña muestra el cielo imaginado del 15 de noviembre de 1889 a las 8:30 horas de la mañana sobre Río de Janeiro, al instante en el cual el emperador Pedro II fue depuesto de forma pacífica, mediante un golpe militar encabezado por el Mariscal Deodoro da Fonseca, que sería más tarde el primer presidente republicano brasileño. Entonces, este instante fue el inicio de la era republicana de la nación brasileña.
Finalmente, hay que mencionar a Portugal, el país madre de Brasil: Su bandera contiene un instrumento astronómico, la esfera armilar, un modelo de la esfera celeste utilizada para mostrar el movimiento aparente de las estrellas alrededor de la Tierra o el Sol. La esfera armilar fue utilizada como símbolo nacional desde el reinado de Manuel I de Portugal (1469 – 1521) representando la nación de navegantes y exploradores por los océanos todavía desconocidos en aquella época.
Así pasamos por los 17 países mundialistas con banderas relacionadas a la astronomía. Estos países abarcan a todos los continentes, salvo Europa: solo 2 de los países mencionados son europeos: Eslovenia y Portugal, una presentación totalmente desproporcional. Esto es una tendencia general: La mayoría de los países europeos tienen banderas más simples, 2 o 3 franjas en colores (Alemania, Francia, Italia entre otros); en algunos casos aparece la cruz, no como constelación, sino como símbolo de la fe cristiana (Inglaterra, Suiza, Dinamarca y Grecia). No hay lugar para adornos como sol, luna o estrellas. Y todo esto, a pesar de que la astronomía como ciencia nació en Europa, considerando los griegos en la antigüedad (Hiparco, Ptolomeo y otros) o también el comienzo de la astronomía moderna en el Renacimiento (Copérnico, Galilei, Kepler). Pero tal vez allí está la clave: un universo desmitificado por la ciencia europea ya no sirve muy bien como símbolo nacional, mientras la mística de pueblos autóctonos en otros continentes se refleja todavía una relación más estrecha y emocional entre cielo y tierra… Podría ser, o me atrevo a decir que sería interesante investigarlo en detalle.